El entrenador personal

Se dice que la figura del entrenador personal se creó en Estados Unidos. Este modelo se puso de moda entre la gente famosa en la década de los cincuenta y sesenta. Hoy en día la base del entrenamiento personal sigue siendo la misma, pero con grandes avances y cada vez tiene más demanda dentro del área de  la actividad física, no solo desde el punto de vista de mejorar el rendimiento, sino también para mejorar la salud.
Hay que diferenciar entre servicio personalizado y entrenamiento personalizado, no es lo mismo la atención que se puede dar por parte del técnico por ejemplo en una sala de musculación, que la que un entrenador personal le da a su cliente. En el primer caso algunas empresas ofrecen el servicio de planificar por escrito un programa, pero los usuarios solo lo pueden llevar a cabo durante el horario que están en el gimnasio; mientras en el caso del entrenamiento personal se pueden incluir actividades fisico-deportivas fuera de las instalaciones o sesiones con material alternativo, ya que, el técnico podrá estar con nosotros a la hora de ejecutarlas.
Por lo tanto el entrenamiento personal es:

  • Un proceso de entrenamiento en el cual el profesional está exclusivamente al servicio del cliente.
  • Se planifica respetando los gustos y preferencias del mismo.
  • control de la ejecución del programa y evaluación de la aptitud física.
  • Sacar el máximo partido a los recursos de los que se dispone.
Para ser un buen entrenador personal debemos de seguir el principio de individualización: cada persona responde de diferente forma al mismo entrenamiento debido a las siguientes razones:
  • Herencia: tamaño del corazón y pulmones, la composición de las fibras musculares, biotipo...
  • Maduración: los organismos maduros pueden usar mayores cargas de entrenamiento
  • Nutrición: una buena o mala alimentación afecta de forma directa al entrenamiento
  • Descanso y sueño: los jóvenes suelen necesitar más descanso del normal
  • Nivel de condición: se mejora más rápidamente si el nivel de condición física es más bajo
  • Motivación
  • Influencias ambientales: estrés emocional, frío, calor, altitud, polución...


Debemos de tener mucho cuidado, ya que se cometen muchos errores dentro del mercado del entrenamiento personalizado. Algunos entrenadores hacen ejercicios al mismo tiempo que entrenan con sus clientes. En ocasiones se puede o se debe entrenar con el cliente, pero de forma que esto cumpla un objetivo específico, como puede ser el enseñarle un ejercicio, aportar atención psicológica, motivar...
Uno de los motivos por los que un entrenador personal no debe ejercitarse sistemáticamente con el cliente es porque envejece como cualquier otro trabajador y es probable que tenga que atender a personas más jóvenes o incluso con más rendimiento que él y que no pueda mantener el mismo rendimiento que el cliente; también se puede dar el caso de que el entrenador tenga varios clientes ese día a diferentes horas y que le sea imposible entrenar al lado de ellos debido al gran volumen de trabajo.



Debemos tener en cuenta la tipología y perfil del cliente:
- El que busca salud, donde el objetivo principal es la mejora de la calidad de vida o bien los que quieren prevenir o tratar algunas patologías.
- Los que quieren mejorar su imagen corporal, reducir grasa, hipertrofia, mejora de la postura...
- Entrenamiento para el rendimiento deportivo (principiantes, intermedio y avanzado)
- Entrenamiento en poblaciones especiales (niños, embarazadas, 3ª edad...)


¿Que demanda el cliente?
  • Atención personalizada
  • Optimizar el tiempo. Que su tiempo sea productivo y eficaz
  • Compromiso. Hay muchas personas que saben entrenar, pero necesitan un compromiso que les "obligue"
  • Mayor seguridad. Minimizar los riesgos, seleccionando ejercicios adecuados y educando al cliente para una ejecución técnica correcta
  • Planificación y periodización. Organización de su actividad a lo largo de la temporada con un mayor control y ajuste
  • Conocimientos especializados. Los clientes solicitan informaciones especializadas: conocimientos suplementarios, terapias alternativas, nutrición, técnicas de ejercicios....
  • adaptación. Adaptar las tareas propuestas al entorno del entrenado: domicilio personal, lugar de trabajo, aire libre...
  • Modificación de hábitos. Debemos ser capaces de inculcar hábitos de vida saludables y evitar factores de riesgo (alcohol, tabaquismo, desequilibrios posturales...)
  • Apoyo motivacional y psicológico. Establecer estrategias para conseguir la motivación del entrenado, además de poseer otras cualidades como saber escuchar, detectar los puntos débiles, etc
Al igual que existen diferentes tipologías en los clientes también sucede en cuanto al entrenador. Este debe de cumplir dos tipos de requisitos: personales y técnicos.


  1. Requisitos personales:
    1. Profesionalidad
    2. Buena presencia
    3. Seriedad en el cumplimiento de compromisos y promesas
    4. Capacidad de escuchar y observar al cliente
    5. Sensibilidad y empatía
    6. Ser un buen comunicador
    7. Ser un modelo de estilo de vida. 
    8. Ser un educador
    9. Capacidad de trabajar en equipo. Ser capaz de coolaborar con otros profesionales de la salud. Para cubrir las necesidades del cliente de una manera global.
    10. Capacidad de reflexión
    11. Creatividad
    12. Compromiso
    13. Formación continuada
  2. Requisitos técnicos:
    1. Conseguir clientes
    2. Diagnosticar sus necesidades y conocer preferencias
    3. Evaluar para diagnosticar la aptitud física
    4. Dominar medios informáticos
    5. Disponer de medios materiales de trabajo:
      1. pulsómetro
      2. tablas, frecuencia cardíaca y valor calórico de los alimentos
      3. Gomas elásticas, mancuernas, fit-ball...
      4. Pequeño botiquín
    6. Planificar los programas de ejercicio
    7. Administrar evaluaciones que acrediten los progresos de los clientes
    8. Conocer las modificaciones fisiológicas del organismo
    9. Conocer las patologías en las que el ejercicio forma parte del entrenamiento
    10. Dominar conocimientos varios (psicología, antropometría, fuerza, flexibilidad, velocidad, relajación...)
El técnico tiene 3 funciones básicas: Evaluación, planificación y ajuste.

La evaluación inicial sirve para establecer un objetivo y debe comprender varios aspectos: entrevista personal, cuestionarios, evaluación diagnóstica, antropometría y composición corporal, test de evaluación de las diferentes capacidades...

La planificación es el camino a seguir para lograr el objetivo planteado, para ello debemos planificar el entrenamiento; diseñar el programa e incluir progresivamente hábitos saludables y ejecutar sesiones.

El ajuste, con esto nos referimos a que se deben realizar evaluaciones o controles de los resultados del entrenamiento y de los hábitos saludables adquiridos para valorar los progresos: 
- Control estricto de las sesiones de entrenamiento (volumen, intensidad, frecuencia...).
- Control de los hábitos saludables adquiridos.
- Seguimiento estadístico de las variables individuales (porcentaje de grasa, carga levantada...).
- Consulta a los profesionales del área médica.





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